miércoles, 29 de agosto de 2012

Los 20 mejores riffs de la historia del rock



Hay riffs de guitarra que los reconocería hasta el párroco de una lejana isla poco habitada y sin radio. Eso los hace especiales y perdurables en la historia. En Rockeros hemos confeccionado esta lista, aunque vale dejar en claro que el orden es absolutamente aleatorio (no somos nadie para decir cual es mejor que otro). Si usted cree faltó alguno no dude en comentarlo.

1.- Sweet child o mine, Guns and roses: Slash ha dicho que lo odiaba y que nació como un ejercicio para calentar los dedos. Axl fue el visionario quien dijo que eso debía transformarse en una canción, y vaya, el hombre sabía.

2.- Iron man, Black Sabbath: Suena como un tiranosaurio rex viniendo hacía ti. Ganó un Grammy el 2000 como mejor interpretación del metal.

3.- Purple haze, The Jimi Hendrix Experience: Fue grabada en 1967 pero suena tan fresca como si la hubiesen grabado ayer. Hendrix aquí realiza una de las intros más memorables que se le escucharon en su carrera.

4.- Satisfaction, Rolling Stone: Cuenta la historia que Keith Richards, guitarrista de los Stone, se despertó en medio de la noche tomó la guitarra y apretó rec en la videocasette grabando la intro. Luego se fue a dormir. Notable inspiración de Morfeo… o quizá de alguna sustancia.

5.- Day triper, The Beatles: A pesar de que no es un riff pesado es adictivo como la Coca Cola. Grabado por la necesidad de lanzar un single de navidad en 1965 funciona como perfecto ejemplo de cómo se armonizaban Lennon y McCarrtney.

6.- Enter sandman, Metallica: Es la primera canción escrita para el Black álbum, nace a partir de un riff ideado por Kirk Hammet. Sandman es el hombre arena símil a lo que en nuestras tierras conocemos como el hombre del saco. La introducción al riff inicial y central, es realmente escalofriante.

7.- Smell like teen spirits, Nirvana: Todo un himno de una generación noventera que esperaba ser representada. Según la biografía de Cobain escrita por Charles R. Cross, Kathleen Hanna, amiga de Kurt y por ese entonces la chica con la que salía Dave Grohl, escribió con spray en la pared: “Kurt huele a esencia de adolescencia” o en un traducción más gráfica: “Kurt huele a Teen spirits” (La chica se refería a un desodorante para chicas usado por Tobi, la chica de Kurt en ese entonces). Esto era una mofa de que Kurt olía a la fragancia de su novia.


8.- My generation, The Who: “Espero morir antes de envejecer” dice la letra y el riff, aunque simple, te hipnotiza. Hasta Los Tres tienen su versión de este clásico del rock.

9.- Back in Black, AC/DC: Sexta pista del disco del mismo nombre, fue grabada en abril de 1980. Tres acordes y una voz desgarrada bastaron para hacer un tema central en la historia del rock.

10.- Smoke on the water, Deep Purple: Pertenece al álbum Machine Head, el tema cuenta la historia del incendio del casino de Montreux en medio de un concierto de Frank Zappa.

11.- Walk this way, Aerosmith: Riff juguetón y bailable, pero no por eso menos rockero. Compuesta por Steven Tyler y Joe Perry, tuvo luego su versión con Run DMC, fusionando el rock con el rap.

12.- Born to be wild, Steppenwolf: Imposible no escuchar este tema y no imaginarse en una moto, en medio de la carretera con una rubia en tus espaldas. Precursora en el estilo hard rock.

13.- Sunshine of your love, Cream: El sicodélico y humeante riff inicial se le acredita a Jack bruce, bajista, quien se pasó la noche creándolo. 

14.- Heartbreaker, Led Zeppelin: Tiene un riff repetitivo que avanza en distintas tonalidades hasta que llega al solo a capella. Jimmy Page en su momento de mayor inspiración.

15.- Rock and roll all nite, Kiss: Pertenece al Dressed to Kill y cierra el unplugged de la banda. Pura fiesta hecha música. ¿qué había en el agua en los 70?

16.- I wanna rock, Twited Sister: En su tiempo atrajo críticas de grupos conservadores por lo hilarante del video. Lo cierto es que el riff, sumado al canto heavy, te golpea en la cara. 

17.- Hot for teacher, Van Halen: La batería de Alex van Halen y la guitarra de Eddie te introducen a un tema con un tempo acelerado y sincopado. El talento en las 6 cuerdas de Eddie es mounstroso.

18.- Even flow, Pearl Jam: Pertenece al grandioso álbum Ten de 1991. El riff es calmado y algo funk, pero rockea.

19.- Should i stay or should i go, The clash: Escrita en 1981, ocupa el lugar 42 en la lista de 100 Mejores canciones hard rock de VH1. Alcanzó el número 1 en las listas británicas, aunque 10 años después.


20.- La granje, ZZ top: Un riff sureño, limpio y clásico. Desde Texas para el mundo y con actitud. Pertenece al disco Tres Hombres publicado en 1973.

jueves, 23 de agosto de 2012

De la última venida de Guns and Roses a Chile


Mientras esperaba pacientemente que Axl asomara su nariz y comenzara a entonar las melodías que lo habían hecho la estrella de rock más codiciada del glam rock a principios de los noventa, me preguntaba cómo la fanaticada era tan incondicional de esperar tanto por ver a un artista.
Guns and Roses se suponía saldría a las 23 hrs, pero los teloneros Dion entre rechiflas se encontraban tocando a esa hora, lo que hacía suponer que la espera sería larga y tediosa.
Tipo 1 AM el Movistar Arena se venía abajo entre tanta pifiadera sumados a los típicos rumos de que el concierto se suspendía porque el bueno de Axl estaba borracho. Ese rumor en particular me saco una sonrisa de felicidad. Felicidad ingenua a decir verdad, ya que me transportó a los noventa cuando el señor Rose sí tenía el derecho a hacerlo ya que sus discos se vendían como pan caliente y la banda tenía una actitud que conquistaba hasta al más duro.

Finalmente cerca de la 1.15 AM se apagan las luces y comienza la fiesta. Chinese Democracy es la encargada de abrir la tercera visita de los Guns a Chile, seguida de una debilucha Welcome to the jungla.
Así, fueron avanzando los mejores hits del Apetite of destruction y Use your illusion entrelazados de los menos conocidos temas del último disco.

La intensa Its so easy, pegada a Mr. Brownstone levantaron el hard rock  de la madrugada mientras que una impecable Sorry del disco Chinese Democracy, le recordaron a todo el mundo que el ahora robusto Axl no está tan acabado como muchos creen.

Pasada la hora de concierto, Dj Ashba, una de las 3 guitarras de la reformada banda, se para frente al público y con una similitud notable con Slash comienza a introducir a todo el mundo a la emblemática Sweet Child o mine creando la algarabía del respetable.

¿Los solos?
Se turnaban. Más menos como la dinámica que pasa en Iron Maiden, todos solean y todos hacen guitarras rítmicas. Son todos rápidos y rudos pero si tuviera que elegir al mejor es sin duda Bumblefoot quien interpretó una preciosa versión de Dont Cry, haciendo melodía y acordes en las 6 cuerdas, muy al estilo del fingerpicking.

Para finalizar, Paradise City y con un Axl corriendo como antaño junto a unos  guitarristas haciendo los mejores esfuerzos por hacer solos que den el ancho de la canción, mientras la pista se llena de confeti. Terminada la canción Rose tira el micrófono al público causando un altercado de proporciones.

Notable noche de un rockero glamoroso y caprichoso que se niega a dejar de ser un rockstar.

¿Qué ha hecho Metallica por el Rock?





Lo recuerdo clarito. Yo tenía unos 10 años y me encontraba en el clásico negocio de playa en el Quisco. De pronto, entró el típico  chascón metalero, en el tiempo en que ser melenudo era sinónimo de tener chica y ser ondero, todo lo que yo esperaba en la vida, con una polera de Metallica. Yo curioso de ver ese nombre en todos lados me envalentoné en preguntarle: “¿qué es Metallica?”. “una banda de rock”, me respondió con una leve sonrisa socarrona en la cara. Para que notara que no hablaba con cualquier niño le pregunté “¿Como los Guns and Roses?”. “Más pesado” me dijo, medio choreado y burlón.

Luego de eso decidí a la vuelta en Santiago descubrir qué tan pesado sonaban y por qué tanta gente los seguía. En ese entonces sin Internet, me llevó un tiempo poder encontrar a alguien que tuviera un casete de los Metallica, pero por suerte en ese entonces aún se escuchaban clásicos del rock en algunas radioemisoras nacionales.

Escuché One y vi el video. Wow, quedé sin respiración por largos minutos, definitivamente eran más pesados que los Guns y su actitud era sacada del mismísimo infierno. Eran chascones pero no afeminados como los rockeros de la corriente Glam. Parecían estar dispuestos a romperte la guitarra en la cabeza si no encajabas en la movida, así que ni modo.

La historia de Metallica es un vaivén de rock and roll. Del 83 al 91 lanzaron 5 discazos: Kill em all, Ride the Lighting, Master of Puppets, …And justice for all, y el Black Album.

Luego el nunca bien ponderado rubio de Seattle, Kurt Cobain, amenazó con dejar sin trabajo a todos, por lo que Metallica innova con guitarras más moderadas en su distorsión y estrenan nuevos looks, cortándose las cabelleras, en Load y Reload.


Luego en el 2003, cuando ahora es el agro metal el que lleva la batuta, hacen St. Anger disco que se aleja del Trash original y coquetea con el Nu metal de manera descarada. Si bien ganó un grammy el 2004 por mejor interpretación de Heavy Metal, los metaleros más ortodoxos hacían arcadas cada vez que salían en la TV. 

Finalmente en el 2008 lanzan Death Magnetic volviendo (o tratando) a hacer lo que los llevo a la cima en los 80-90, un rock crudo, rápido, y frontal. La crítica agradeció aquello, pero por otro lado de alguna manera se ven forzados a volver a sus raíces, dados la negativa de los más fieles seguidores.

Mención aparte para su disco con Lou Reed , Lulu, el cual los críticos hicieron pebre, y la verdad es un disco muy poco entendible.

Pero fuera de los palos de ciego que ha dado la banda, Metallica es una banda central en la historia del rock. Han tenido discazos y sin duda han sido un puente entre el trash metal y la gente no entendida.
Sus rounds con Dave Mustaine y  la muerte de Cliff Burton le han dado aquella consistencia natural que toda gran banda de rock necesariamente debe tener en su carrera.

Por otro lado, ha decir verdad nunca he entrado a un bar rockero donde no se oigan los acordes de algún tema de Metallica. Por algo será.

viernes, 3 de agosto de 2012

Lo nuevo de Slash





Antes que todo debo ser sincero. La primera vez que vi a Slash tenía 12 años y me voló la cabeza. Por primera vez en mi corta experiencia musical, hasta ese momento, veía a un guitarrista capaz de opacar al vocalista. Aunque claro el vocalista era Axl Rose quien tenía la voz, el carisma y la belleza; o sea todo para no ser opacado. Eran la dupla perfecta.
Slash me pareció la hostia misma. Parecía un tipo recién levantado y desaseado pero capaz de llevarse a todas las chicas guapas de la fiesta solo a punta de actitud. No le importaba tener toda la melena en la cara ni mucho menos llevar un cigarrillo encendido entre toda esa cabellera. Era una cruza entre Hendrix, los Ramones y un alcohólico de Los Ángeles dispuesto a volarte los sesos.

Dicho esto señor lector, y siguiendo con la sinceridad inicial, ahora usted sabe que mi grado de objetividad como crítico esta vez estará algo distorsionada.
Hoy día Slash tiene 47 años. Dejó atrás su pasado de drogas pero no de rock and roll. Y así es como en mayo de este año lanzó su segundo disco solista del cual hablaremos en esta humilde columna con todo el juicio crítico que me sea posible.

Apocalyptic Love es el nombre, consta de 13 temas más 2 bonus track y tiene la siguiente formación: Slash en la guitarra principal, Myles Kennedy en la voz, Todd Kerns en el bajo y Brent Fitz en la batería.

El disco abre con el tema homónimo y el wah wah de Slash que reconocería hasta mi hijo de 7 años. Si pudiese registrarse el sonido de una Les Paul más un Wah seguro llevaría el nombre de Saul Hudson.

One Last Thrill es la siguiente y es una patada en la cara. La voz de Kennedy suena como los Sex Pistols en su apogeo y Slash solea como si fuera un veinteañero.
La placa coquetea con el pop, con el glam rock, con el funk y con el punk, pero no se casa con nadie.
El desconocido Myles Kennedy es tremendo. Quizá lo mejor del disco. Es afinado como pocos hoy en día y tiene una tesitura notable. Cuando canta abajo es conmovedor y nos recuerda la época del grunge; cuando mete el falsete parece la voz de una mujer enrabiada y recuerda lo mejor del glam rock.

El momento más inspirado ocurre en el minuto 38. Ahí se manda tres cortes que suenan a clásico. Bad Rain es suave y ruda a la vez; Hard and Fast es un tren descarrilado y Far and Away es la típica balada pero tocada por tipos que saben.
Aun cuando la placa consta de temas cañeros sin duda no es el mejor disco de Slash. Lamentablemente los solos de guitarra no son de lo mejor que al guitarrista le he oído. En oportunidades se oye un Slash poco inspirado, repetitivo y sin ideas.
Además abusa del wah wah y la mezcla de estilos es algo desconcertante.

 Pero hey muchachos, estamos en el año 2012, no tenemos la MTV y lo que más suena en la radio no es precisamente rock and roll, por lo que discos como este son bienvenidos y agradecidos sin lugar a dudas.